La pobreza y el hambre

Antes de ayer era el día de los bloggeros contra la pobreza y ayer el día mundial contra el hambre. Y yo llevo 2 días pensando en como escribir algo a tractivo e interesante sobre ambos temas y no se me ocurre nada.

Lo único que me viene a la cabeza es la suerte que tengo de que mi vida sea tan fácil y que no me falte de nada. Miro a mi hijo, rollizo y feliz y soy consciente de que mi suerte es la suya. Mi cabeza esta tan ocupada con la maternidad y la crisis que me cuesta pensar en otras cosas. La crisis nos invade y me siento en un sálvese quien pueda y los países del tercer mundo quedan tan lejos… Nuestro cuarto mundo va en aumento, ¿Cómo vamos a pensar en el tercer mundo que no tiene nada que ver con nosotros?

Las ONGs de ayuda al desarrollo deben estar pasándolo mal y esto es solo el principio. Las campañas de Navidad van a tener que ser feroces y aun así no creo que consigan los resultados de años anteriores. O quizás la escasez y la penuria ablandé al ciudadano medio y le torne más solidario.

Solidaridad y pobreza, se me vienen a la cabeza nuestras experiencias durante el viaje a Sudeste Asiático. Las niñas de Yagon… nuestras niñas, que se ayudaban las unas a las otras, que guardaban los dólares que sacaban para dárselos a sus padres. La verdad es que cuanto mas se tiene menos se da, aunque se suene a frase hecha es así. Si analizamos que es lo que necesitamos para vivir nos daremos cuenta de la cantidad de cosas superfluas de las que nos rodeamos. Y nos cuesta soltar 10 euros al mes para ayudar a los demás, sean del cuarto o del tercer mundo.

Hablando de la pobreza y del hambre, esta entrada ha quedado bastante pobre y un poco confusa, como yo misma me siento… quizás otro día pueda resarcirme.


Os invito a leer mis entradas anteriores sobre Birmania y el Tibet… ¿donde quedaron ahora los problemas de estos países que hace unos meses acaparaban todas las portadas?

También os invito a visitar el blog de nuestro viaje a Sureste asiático: http://pericoylula.blogspot.com/

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